En La corte de las tinieblas, Víctor Dixen sentó la base sobre las que quería desarrollar toda una saga: en 1715 Luís XIV toma la decisión, mediante las artes de unos doctores que bordean la línea entre la ciencia y la mística, de transmutarse. Se convierte en vampyro adquiriendo así la inmortalidad y convirtiéndose en el ser más poderoso y temido del mundo. La Magna Vampyria se extiende a la vez que detiene el tiempo, sometiendo a lo que denominan el cuarto estado (los plebeyos) al yugo de un rey y toda una corte de vampyros que se alimentará de la sangre de ese mismo pueblo para conservar su poder.
"Vestido de forma majestuosa, enaltecido por su poderío militar,
el Inmutable me parece más invencible que nunca".
Víctor Dixen, La Corte de los Milagros
La familia de Jeanne es protagonista del inicio del primer libro cuando es masacrada por formar parte de un movimiento revolucionario rebelde que pretende acabar con los vampyros. Ella sobrevive, pero debe asumir una nueva identidad, la de la noble Diane de Gastefriche, para salvar su vida. Lo que no prevé es que terminará en la Gran Caballeriza, como protegida por ese mismo rey al que solo puede profesar una inmensa sed de venganza que la llevará a escalar posiciones hasta convertirse en una de sus escuderas más cercanas al superar todas las pruebas y acceder al Sorbo del Rey. Jeanne pretende esa proximidad con el fin de llevar a cabo su plan de venganza pero, una a una, las traiciones, los complots y la mascarada de la que forma parte la arrastran al punto de partida.
Considerada por el monarca como una de sus escuderas favoritas tras haber salvado su vida y destapado una conspiración que se urdía contra él, ahora Jeanne es elegida para acompañar a otros dos destacados escuderos en la caza de la que supone la mayor amenaza para el Luís IV; un vampyro que se oculta en las profundidades de París y que se ha atrevido a desafiarle. Si Luís lo encuentra se adueñará del poder que su rival ostenta y esto lo convertiría en invencible. Es por eso que Jeanne debe encontrar antes a La Dama de los Milagros y darle muerte. Una vez más, debe vencer a un enemigo del rey para evitar un mal mayor. Parece que la misión de eliminarle siempre pasa por la de salvarle.
"Tráigame a la Dama de los Milagros. Esta noche ejecutaré una matanza masiva, será un gran trabajo, pero sin refinamientos. Para ella, sin embargo, reservo mis torturas más sutiles, las más largas y dolorosas, hasta que revele todos sus secretos al Rey de las Tinieblas".
Víctor Dixen, La Corte de los Milagros
Así es como Jeanne, parapetada tras la identidad de Diane, viaja a París y se enfrenta a los contrastes de la gran ciudad. La pobreza del pueblo, la ceguera voluntaria de la corte ante cómo los plebeyos subsisten con dificultad mientras los excesos marcan el día a día de los nobles y los secretos que descubrirá la protagonista sobre la misteriosa Dama de los Milagros y sobre sí misma hacen de esta segunda entrega una emocionante continuación que no nos permite bajar la guardia. Las intrigas y la estrategia política de los virreinatos le otorgan profundidad a la trama y nos obligan a prestar atención a lo que ocurre más allá de las fronteras de Francia.
Destaca en esta segunda entrega cómo Víctor Dixen sigue construyendo y perfilando a los vampyros. Siembra la narración de detalles que nos ofrecen información sobre las normas que los rigen, su naturaleza, aquello que les hace vulnerables... Y todo esto lo la desarrolla el autor sin frenar la narración ni el avance de la trama (que es trepidante) en ningún momento, de modo que vamos descubriendo el universo de Vampyria a medida que nos adentramos en él. Se percibe un universo perfectamente diseñado, sin grietas ni vacíos, lo que aporta seguridad al lector a la hora de adentrarse en una saga que promete ser larga.
"¿Y si de verdad no existiese ninguna esperanza para los mortales, para los vampyros, para nadie?"
Víctor Dixen, La Corte de los Milagros
La protagonista es fiel al trazo con el que el autor nos la presentó desde un primer momento. Jeanne persigue unos intereses particulares concretos y va demostrando valentía a la vez que torpezas propias de quien no ha sido entrenada para la batalla, lo que la aproxima al lector y le confiere realismo y credibilidad como personaje. Para quienes leyeron el primer libro y quieran saber si se encontrarán con los personajes que sobreviven a la historia que narra, puedo decirles que sí. La misteriosa Naoko, Suraj, Alexandre... incluso Hélénaïs, quien tendrá un papel muy interesante en esta segunda entrega. Todos ellos y algunos más aparecen en La corte de los Milagros. También aparecen personajes nuevos, un par de ellos me han fascinado especialmente pero no voy a dar detalles para que los descubráis vosotros. Solo os adelanto que uno es un vampyro y el otro... no.
Esta lectura me ha confirmado que Víctor Dixen ha llegado para quedarse. Ha removido la literatura de vampiros y nos la presenta con variaciones que la enriquecen, la consolidan y le sacan brillo. La ventana que el final de este libro me ha abierto a claves que me resultan más que interesantes, han hecho que lo cierre deseando que llegue octubre para que Roca Editorial publique La corte de los Huracanes y poder seguir acompañando a Jeanne en esta misión de venganza que me tiene completamente enganchada.
"La sed de los vampyros está creciendo en todo el mundo".
Víctor Dixen, La Corte de los Milagros
Victor Dixen ha sido galardonado en dos ocasiones con el Grand Prix de l'Imaginaire y es considerado uno de los máximos exponentes de la ficción especulativa en Francia. Ha vivido en París, Dublín, Singapur y Nueva York.
