Un misterioso criminal está tratando de reproducir unos crímenes cometidos casi treinta años atrás. Unos crímenes que cometió un asesino en serie al que Teresa Battaglia encerró y que hace solo unos días se fugó de una cárcel de alta seguridad. Todo apuntaría a este mismo individuo si no fuera porque el fugado se entregó solo unos días después, aterrorizado por sentirse en el punto de mira del nuevo asesino. Solo está dispuesto a hablar con Teresa, que en uno de sus momentos de mayor fragilidad a causa de su deteriorada salud, deberá desentrañar las pistas y volver a encabezar una caza frenética.
Teselas fabricadas con huesos humanos, una narración a dos tiempos con la comisaria en el eje de las acciones que se desarrollan en ambos y una tercera voz narrativa que nos llega de muchos siglos atrás convierten Hija de las cenizas en una historia que, más allá de la resolución del misterio planteado por los crímenes, nos sumerge de lleno en la experiencia vital de Teresa, desnuda al personaje capa a capa hasta que queda al desnudo y nos regala a los lectores una historia tridimensional, basada en las relaciones entre la comisaria y su equipo (especialmente entre ella y Massimo) y en cómo nuestro pasado construye quiénes somos en el presente.
La nueva entrega de la serie Teresa Battaglia es, sin duda, la que más profundiza en la comisaria protagonista de estas novelas que dieron comienzo en 2019 con Flores sobre el infierno y que continuó con La virgen negra, una de las mejores novelas negras que he leído no tanto por la complejidad del caso, que sí que está muy elaborado, sino porque además la pluma de la autora eleva el texto a una categoría superior. Lo tangible de sus descripciones, la elección de cada una de las palabras, el buen ritmo y los tiempos controlados de la narración la convierten en una autora indispensable en las estanterías de los amantes del género. Y con Hija de las cenizas, Ilaria Tutti nos da todo eso y además nos lleva de la mano a conocer el pasado de la protagonista para comprender mucho mejor el por qué de su presente.
Si bien el cliché del inspector o comisario atormentado es un clásico en la literatura del género, Ilaria Tutti da un paso más y construye una comisaria que, tras una carrera brillante aunque cargada de dificultades, se encuentra en declive a consecuencia de la demencia que sufre. El Alzheimer causa estragos en la mente de Teresa y, si ya en La virgen negra se plantea la posibilidad de retirarse, es en Hija de las cenizas cuando los síntomas se agravan y deberá tomar una decisión que no solo la afectará a ella. Su estado de salud no le impedirá desentrañar más de un secreto en esta entrega y nos sorprenderán los giros que toman algunos hilos argumentales hacia el final.
Ilaria Tuti estudió Economía y, gran amante de la pintura, ha sido ilustradora en una pequeña editorial. Ha publicado varios relatos, uno de los cuales, «La bambina pagana», obtuvo el Premio Gran Giallo Città di Cattolica 2014. Su novela Flores sobre el infierno (Alfaguara, 2019) fue la primera entrega de la serie Teresa Battaglia y vio la luz en Italia en 2018, donde enseguida cosechó un gran éxito. Sus derechos han sido vendidos a la televisión, convirtiéndose en la serie más vista del primer semestre de 2023 en Italia, y ha sido traducida en trece países. Ahora mismo se está rodando la adaptación de La virgen negra (Alfaguara, 2021), su secuela, que fue finalista del Premio Edgar Allan Poe y del prestigioso Premio Scerbanenco. Hija de las cenizas (Alfaguara, 2023) es la tercera entrega de la serie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario