Los arrozales de Cullera son el escenario del hallazgo del cuerpo sin vida de una joven. Comienza así una caza del criminal que tiene como protagonistas a Yago Reyes y Aines Collado, inspectores de homicidios que se verán envueltos en una investigación de múltiples aristas en la que un paso en falso puede dejar en libertad a un peligroso depredador. Descubrir quién es la víctima y cerrar el círculo en torno a su familia y amigos puede ser la clave para resolver el crimen, pero también deberán aprender a trabajar juntos si quieren tener éxito en la misión.
"Entre los porqués, los cuándos, los cómo y los quienes, conseguí articular una pregunta con la voz quebrada, la que más me preocupaba, la que dependiendo de cuál fuese su respuesta rompería mi alma para siempre".
Marta Martín Girón, Dama blanca
Dama blanca comienza con un golpe de efecto. Somos testigos de la enrevesada deriva de la mente del asesino mientras busca un lugar donde deshacerse del cuerpo. Y esta es la primera, pero no la última vez, en la que la autora nos hace testigos de las cavilaciones del cerebro criminal en una novela que nos ofrece la perspectiva de la víctima, de su familia, de sus amigos y de los investigadores. Pero también la del asesino. Es así como a la de la novela policíaca, se suma también la vertiente del thriller psicológico dotando de un buen ritmo y agilidad a la narración.
La investigación del crimen nos lleva en primer lugar a descubrir la identidad de la víctima, una adolescente quince años a la que iremos conociendo poco a poco a través de pequeños saltos en el tiempo que nos la muestran días antes de su desaparición. Es la forma en la que nos aproximaremos también a su entorno e iremos alimentando nuestras propias sospechas, que recaerán sobre su círculo más cercano. Su familia y amigos se nos colocan en el punto de mira y no es difícil establecer móviles para varios de ellos. Además, no dejará de sorprendernos la verdadera personalidad de la víctima que también nos reserva más de una revelación para entretejer un poco más el misterio y plantearnos algunas dudas extra. No será hasta el final cuando sepamos toda la verdad, aunque más de un lector aficionado al género puede haberlo adivinado antes.
"Al final serás tú quien se convierta en una Dama Blanca".
Marta Martín Girón, Dama blanca
El tándem formado por Yago y Aines es un tanto peculiar. Él llegó hace menos de un mes a su nuevo destino y la que ha sido nombrada como su compañera mantiene una actitud más que distante con él. Parte de la narración tiene como protagonista al propio Yago, su perspectiva de la investigación y a la vez su desasosiego ante el inexplicable comportamiento de Aines. Un misterio secundario que también verá resuelto el lector a su debido momento.
El desenlace, más o menos sorprendente dependiendo de la perspicacia del lector y lo asiduo al género que sea (yo lo descubrí bastante pronto), nos ofrece un buen puñado de reflexiones como poso de la lectura. Lo poco que podemos llegar a conocer nuestro entorno más cercano es una de ellas. En ocasiones el mal está más cerca de lo que pensamos y no se esfuerza ni por esconderse, sintiéndose a salvo por la confianza que depositamos en la persona que lo encarna. Además, la amistad y los límites que son necesarios establecer dentro de ella, también es un tema que atraviesa la historia.
Marta Martín Girón nació en Madrid y actualmente reside en un pueblo del Delta del Ebro. Es autora de más de una docena de libros, entre los que destaca la trilogía del inspector Yago Reyes (
Dama blanca, Luna roja y Alma púrpura) y
Cada niña que murió. Desde 2014, año en el que publicó por primera vez, lleva más de 100.000 ejemplares vendidos en formato digital y suma miles de lectores.
¡Hola!
ResponderEliminarMe llama bastante la atención esta historia, me la apunto. ¡Muchas gracias por tu reseña!
Nos vemos entre páginas
La vida de mi silencio