jueves, 21 de mayo de 2020

LAS MUJERES DE WINCHESTER (Tracy Chevalier)



Tenía muchas ganas de hablaros de esta historia. La empecé con cautela, no sabía qué me iba a encontrar y no había leído antes a la autora a pesar del éxito que tuvo La joven de la perla. De modo que para mí, Tracy Chevalier era toda una aventura y Las mujeres de Winchester, que Duomo me presentaba en una edición realmente deliciosa, era toda una incógnita. 

Violet es una mujer que, a los treinta y nueve años, continúa soltera y reside junto a su madre en la casa familiar. Su hermano Tom se marchó a vivir con su esposa y ha formado una familia, mientras que a ella solo le queda el recuerdo de todo lo que le ha arrebatado La Gran Guerra. Primero se llevó a su hermano George, lo que supuso un gran golpe a la familia y del que su madre no parece haberse recuperado. Un carácter amargo y una actitud de velado desprecio hacia su hija hacen cada día más difícil la convivencia. 

Pero además, La Gran Guerra se llevó al prometido de Violet. Y con él, la posibilidad de crear su propio hogar y sentirse integrada en la comunidad femenina, que observa con desdén a las mujeres que no han alcanzado la meta de convertirse en esposas y madres. Así es como la protagonista se ve abocada a resignarse a un destino reservado para esas mujeres que vivirán solas hasta el momento en que no puedan hacer nada más que convertirse en una carga para otros familiares. 

"Era lo más cerca que Violet estaría nunca de presumir de un hijo propio, y la situación la hizo sentirse bien, aunque también le pareció patética."
Tracy Chevalier, Las mujeres de Winchester

Violet decide que es el momento de dar un paso al frente y establecerse por su cuenta fuera de la residencia familiar. Sueña con una libertad y una independencia que no lo logrará si no se aleja, aunque sea un poco, de su hogar e intenta valerse por sí misma. Esta decisión marca el comienzo de la verdadera historia de Violet. Coloca a la protagonista de esta novela en el principio de una tímida pero valiente aventura que quedará inaugurada cuando se mude a Winchester (una ciudad al sur de Inglaterra no muy lejos de la residencia de su madre), pero sobre todo, cuando de forma inesperada pase a formar parte de la comunidad de bordadoras de la catedral. 


La autora nos descubre a una Violet que, pese a las ataduras morales y ajustadas al contexto histórico, es fuerte, valiente y realmente moderna. Violet tiene muchos miedos lógicos enmarcados en el pensamiento del periodo de entreguerras, pero eso no le impide tomar muchas decisiones en pro de la amistad y el amor que nos sorprenderán por su arrojo y nos encantarán por su justicia. 

Pero además, Violet es una mujer con sentimientos atemporales. No necesitamos vivir el mismo periodo histórico que ella para sentirnos como ella se siente. Y es por eso que no nos cuesta empatizar con un personaje que la autora dibuja con tanta delicadeza y precisión. No nos cuesta imaginarnos tomando la decisión de si apoyar a nuestras amistades (como nos dicta el corazón y el sentido de justicia) a pesar del miedo al rechazo social que ello pueda acarrear. Tampoco nos es difícil evocar el temor que puede producir sentirnos solos, desplazados u olvidados cuando todos aquellos que nos acompañaban en nuestro camino hayan encontrado el suyo propio y nosotros no tengamos aún el nuestro. 

"Pero a las mujeres nos han preparado para eso: para darnos a los demás, para hacerles la vida fácil, sin importar lo que nosotras sintamos. Ser siempre tan generosa puede convertirse en una tarea agotadora e ingrata."
Tracy Chevalier, Las mujeres de Winchester

Encontrará un refugio a su propia soledad y una vía de escape a sus pensamientos en la tarea del bordado. La adhesión a la comunidad de bordadoras llegará a nuestra protagonista casi de forma sorpresiva e inesperada y será entonces cuando Violet descubra sentimientos nuevos como el orgullo por el fruto de su esfuerzo y la necesidad de trascendencia. 


No os quiero desgranar todas las vivencias de Violet, porque os va a encantar descubrirlas a vosotros. Las mujeres de Winchester me ha tenido muy enganchada y no puedo hacer más que recomendarla. Me ha encantado acompañar a Violet en todas las decisiones que va tomando a lo largo de la trama y preocuparme, sorprenderme e incluso sonreír sin darme cuenta. 

La narración es activa y no se estanca. Los capítulos tienen la extensión adecuada para que avancemos sin dificultad y con apremio a través de una historia marcada por el paso firme de una protagonista que se sumará a esa lista que todos tenemos de personajes que nos han dejado huella por una u otra razón. 

"Había tantas personas que escondían historias: un marido que se había ido, un bebé sorpresa al que se hacía pasar por hermano o hermana, una pasión equivocada, una mujer perdida. (...) Cómo navegar por la vida cargando con ese equipaje sin que te vuelvas una persona triste, amargada o sentenciosa, ese era el reto."
Tracy Chevalier, Las mujeres de Winchester

Además, os vais a encontrar un final redondo. La evolución del personaje pide a gritos un final que le haga justicia y Tracy Chevalier lo teje de forma inteligente para satisfacer nuestro deseo sin resultar obvio ni previsible. Había muchas posibilidades para Violet. A medida que avanzamos en su historia nos damos cuenta de que, aunque en un principio su vida parece un callejón sin salida, sus posibilidades son infinitas y podía haber elegido una o varias de ellas. Y la que finalmente elige es, para mí, la más acertada. 


Tracy Chevalier alcanzó el éxito internacional con su novela La joven de la perla, traducida a 38 idiomas y adaptada al cine protagonizada por Scarlet Johansson y Colin Firth. 

Además de Las mujeres de Winchester, en el catálogo de Duomo podréis encontrar La voz de los árboles y Las huellas de la vida

Lee aquí las primeras páginas de esta novela. 

Gracias a Duomo por regalarme una historia y unos personajes con los que he disfrutado tanto. 





domingo, 10 de mayo de 2020

DESAPARECIDA EN SIBONEY (Rosario Raro)



He tardado mucho en publicar esta reseña, ya que hace aproximadamente un mes que terminé esta novela de Rosario Raro. Me ha costado un poco reorganizar mis ideas respecto a la historia y lo que quería contar de ella. Finalmente he decidido no contaros demasiado sobre la trama, porque uno de los mejores puntos de Desaparecida en Siboney es no saber cómo continuará la historia, qué es lo que os encontraréis en el siguiente capítulo y qué rumbo tomarán los protagonistas. 

"El 29 de noviembre de 1874, Dulce Sargal desapareció de su hacienda en Siboney, a unos veinte kilómetros de Santiago de Cuba. Estaba casada con Bartolomé Gormaz, uno de los hombres más ricos de los territorios españoles de ambos lados del Atlántico. Ella era criolla, española nacida en ultramar, y él, natural de una aldea cercana a Lebrija, en Sevilla."
Rosario Raro, Desaparecida en Siboney

La autora nos lleva y nos trae desde la Cuba colonial hasta Barcelona, inmersa esta última en la transformación industrial que aconteció a finales del siglo XIX y que provocó una sacudida en la forma de vivir y entender el proceso productivo. Si bien Barcelona ya había trabajado con ahínco durante el siglo XVIII para convertirse en una de las ciudades punteras en la manufactura del continente, será en el siglo XIX cuando se consolide su liderazgo. Pero esta Barcelona próspera y moderna, esconde en la trastienda mucha historia en la sombra, que poco a poco ha ido viendo la luz. 

Fueron muchos los catalanes que se aprovecharon de mano de obra esclava en las Américas. Si bien no se ha podido establecer con rotundidad la magnitud de la participación catalana en el tráfico de esclavos, sí es conocido cómo algunas de las familias más pudientes de la ciudad amasaron su riqueza contando con esta mano de obra. La confiscación de numerosos barcos de mano de los británicos y la identificación de sus propietarios ha dado muchos nombres para esa lista, pero obviamente era imposible abarcar la totalidad de las transacciones y se cuentan solo con estimaciones. 


Algunas de esas familias son las que aparecen en esta novela, que arranca prácticamente con la desaparición de Dulce. La hija de esta, apenas una niña, es incapaz de lidiar con el dolor de su desaparición y la aparente indiferencia de su padre al respecto y recurre a su tío, Mauricio Sargal, a través de una carta que rompe al hombre y le obliga a regresar a Cuba desde Barcelona para tratar de encontrar a su hermana. O al menos, para descubrir qué es lo que ha podido sucederle. 

Si bien la novela que nos presenta Rosario Raro es la historia de una desaparición, de una hija desesperada, de un hermano resuelto y dispuesto a encontrar a Dulce y de un hombre poderoso dueño de haciendas y personas, es sobre todo una historia de costumbres. De gentes y de culturas. De cómo la vida desentendida, libertina y terrenal de Mauricio Sargal está bien considerada, mientras que esa muchacha que trabaja con ahínco para sus amos es vapuleada, maltratada y menospreciada hasta el horror. 

Es la historia de cómo una mujer puede desaparecer de su hacienda de un día para otro y su marido no mueva un dedo para encontrarla, mientras que el resto de gentes o bien den por hecho que se ha marchado con otro hombre abandonando a su propia hija, o bien ni tan siquiera pierdan un segundo de su tiempo en preguntarse qué habrá sido de ella. De cómo Dulce estaba realmente sola y al desvanecerse nadie la echa de menos. Y muchas de las escenas que nos vamos a encontrar son tan realistas, que abofetean conciencias y remueven entrañas. 

"Himar tenía la mirada perdida como si flotara sobre sus recuerdos de África entremezclados con sus vivencias allí. Romi sintió un torbellino en la boca del estómago y se apoyó en la pared exterior de uno de los bohíos. Ángela miró a la cocinera para implorarle que callara."
Rosario Raro, Desaparecida en Siboney

No solo vais a encontrar el relato de lo acontecido a Dulce, su hija y su hermano. Hay mucho elenco en esta presentación. Hay secundarios profundos y muy bien definidos y hay tantas líneas argumentales como personajes. Muchas de ellas convergen y otras no se encuentran nunca, pero están bien narradas y merecen la pena. 


La autora hace un gran trabajo de contextualización. Se percibe el trabajo documental en cada página y un esfuerzo por dibujar cada momento, cada ciudad, cada paisaje, cada camino, a las gentes y las costumbres. Rosario Raro tiene éxito en este aspecto y me ha impresionado cómo ha sido capaz de llevarme tan lejos en el tiempo y el espacio, haciendo que no me cueste imaginar que estoy viendo todo esto desde mi ventana. 

"Santiago de Cuba se extendía ante sus ojos. Las montañas parecían perfiles de olas solidificadas, detenidas en piedra. Las líneas emplumadas de palmeras separaban la superficie marítima de la tierra que los rodeaba en su entrada. Sintió que su recuerdo de aquel lugar empalidecía contrastado con la exuberancia real del oriente de la isla."
Rosario Raro, Desaparecida en Siboney

He de decir que al comenzar esta historia me costó sumergirme en la trama. Tal vez demasiado acostumbrada últimamente a thrillers vertiginosos y apabullantes en acción, tuve que reposar esta narración y adentrarme poco a poco en aquello que Rosario quería contarme. Es una lectura exigente. Es ese tipo de lectura que quiere enseñarte más de una cosa a la vez. Quiere que sigas a los personajes en su destino, pero además quiere que comprendas el por qué del momento, el por qué esas gentes se comportan de esa forma, hacia dónde van y cómo van a ir. Además, tiene un final de esos que merecen ser leídos. De los que te hacen cerrar el libro y acariciar la contraportada satisfecha de añadir esta a tu lista de historias.


Tuve la suerte de recibir este ejemplar de manos de la autora, como primer premio en el IV Concurso de Relato Rápido Novembre Negre (Puerto de Sagunto), en el que ella ejercía como miembro del jurado. Quiero aprovechar para agradecerle, tanto el ejemplar como el trato exquisito que tuvo conmigo. 

Rosario Raro, profesora de Escritura Creativa en la Universitat Jaume I, es además doctora en Filología Hispánica. Nació en Segorbe, Castellón, en 1971 y hace más de veinte años que imparte cursos y talleres literarios para instituciones diversas. Premios nacionales e internacionales reconocen el talento de sus obras, traducidas al catalán, al japonés y al francés. Otras de sus obras son La huella de una carta y Volver a Canfranc (Planeta 2015), con la que ha sido finalista de los premios de la crítica valenciana y los derechos han sido adquiridos por Diagonal TV para su adaptación a la pantalla.