lunes, 26 de septiembre de 2016

UNA LIBRERÍA CON MAGIA (Thomas Montasser)


Valerie es una joven estudiante de económicas prometedora, de modo que cuando su tía Charlotte desaparece dejando como única instrucción que se haga cargo de su negocio, no duda en presentarse y establecer un plan de acción para liquidarlo de la mejor forma posible. 

Charlotte es dueña de una librería muy peculiar, con enormes estanterías repletas de ejemplares y una organización muy personal que no incluye ningún método digital de archivo o inventario. 

"Y por muy optimistas que seamos (que naturamente lo somos), Ringelnatz & Co. era, incluso dentro de las librerías pequeñas, una librería pequeñísima. Un local de venta en un bajo, perpendicular a la calle, representado por un «gran» escaparate que estaba dividido en dos por una puerta de cristal. dentro, a ambos lados, así como al fondo a la izquierda, estanterías repletas de libros apretujados; al fondo a la derecha, una pequeña escalera de dos peldaños que daba a la cocinita. Allí dos puertas estrechas, una de las cuales llevaba al aseo y otra al patio interior donde, desde hacía mucho tiempo, no se producía ningún intercambio social. Todo esto en apenas cincuenta metros cuadrados."
Thomas Montasser, Una librería con magia


No nos sorprende el vértigo que siente Valerie cuando abre la puerta de la librería que hacía años no visitaba, pero viéndola esta vez con otros ojos; los del empresario en apuros. 

Pronto comprenderá la joven que una librería no es un negocio que se rija por las normas que lo hacen los demás. Una librería no despacha productos sin más, sino que requiere de una sensibilidad especial para dar a cada cual lo que necesita y que en el acierto radica el éxito del librero. Si podrá o no adaptarse a este modelo empresarial tal lejano al que conoce, nos mantendrá a todos al pie de la página hasta el final. 

La incertidumbre por lo que le haya podido suceder a su tía Charlotte nos acompañará hasta el final de la novela. Las perspectivas no son buenas, ya que se trata de una señora mayor que ha desaparecido sin dejar nada más que una especie de "últimas voluntades" protagonizadas por el negocio y nombrando a Valerie encargada del mismo. 

No solo servirá esta experiencia a la joven para conocer un poco más a su tía, sino que al calor del samovar, descubrirá a golpe de página a los grandes autores y a algunos que, más desconocidos, no dejarán de marcarla de una forma u otra. 

¿Qué esconde la novela de Montasser? Esta historia, muy corta, pero con una cuidada redacción y un detallismo exquisito, guarda entre sus páginas innumerables referencias bibliográficas que harán las delicias de los lectores más avezados

Se palpa la pasión por la literatura en cada página, cuando Montasser describe un ejemplar curioso, la narrativa de un autor e incluso cuando selecciona de una forma muy acertada fragmentos de otras obras con la finalidad de transmitir una sensación concreta. 

Dispone Una librería con magia de un narrador peculiar y encantador, que con un tono cercano y confiado nos hace disfrutar con cada párrafo. 

Además esconde entre sus páginas la historia de una obra misteriosa y fantástica, de la que no os revelaré nada más que estoy segura de que a todos nos gustaría poseer. 


No puedo describir Una librería con magia de una mejor forma que diciendo que es una historia para lectores, que enamorará a los libreros

Podéis leer el avance de esta novela que Maeva nos facilita aquí. Además, nos acerca la figura y opinión del autor sobre el mercado literario en esta entrevista

Thomas Montasser trabaja como agente literario en Múnich. Autor de varias novelas épicas y varios libros infantiles bajo el seudónimo de Fortunato, también ha trabajado como periodista, profesor universitario y director de un pequeño grupo de teatro. Una de sus grandes aficiones es visitar tiendas de antigüedades. Con Una librería con magia realizó uno de sus grandes sueños: escribir un libro sobre la magia y el poder de las historias.



lunes, 12 de septiembre de 2016

TRES HISTORIAS DE AMOR, MIS DESASTRES Y YO (José Vicente Vinuesa)


Tres historias de amor, mis desastres y yo cuenta las andanzas de Martín Latorre y su periplo personal a través de un puñado de recuerdos, sentimientos y vivencias que marcaron su pasado hasta constituir su presente. La imprevista, siempre sorprendente e implacable aparición del amor en la juventud, que se prolonga con una intensidad in crescendo, nos acercará las mejores reflexiones aportadas por el autor en boca de este protagonista. 

Las historias de amor están presentes en todas sus variantes, desde la apasionada a la cotidiana, pasando por las crisis y la pregunta siempre sin respuesta del por qué se marcha y nos deja tan extrañamente perplejos. 

"Me desorienta pensar en tu pérdida como algo definitivo, pero sé que eso también está en la naturaleza humana. Trato de hacerme a la idea de todo lo que nos ha pasado, mientras solo acierto a ver una parte de tu terrible dolor, un dolor producido por ese cuchillo que nos ha clavado el destino traicionero, aunque fuera yo quien lo empuñara como un idiota."
José Vicente Vinuesa, Tres historias de amor, mis desastres y yo

Pero no esperéis encontrar una historia plana sobre las dichas y desdichas de Martín en esta novela. Hay tantas historias e hilos como personajes. ¡Y hay muchos personajes! Y son de esos de los que tienes la sensación de poder alargar la mano y estrechársela a ellos. Porque están cortados con un patrón imperfecto, como cada uno de nosotros. Porque se desesperan, se equivocan, sufren y disfrutan la vida como lo que al final es; un camino que solo transcurre hacia delante, pero que está plagado de trampas con resorte, aliados y rufianes, con tramos de una luz cegadora y otros en la más absoluta oscuridad. 

La desaparición de Don Juan Bermejo, un galán de cine retirado venido a menos tras un accidente de bici que tal vez esconda algo más de lo que parece, nos salpica a lo largo de la historia. Pero no será hasta casi el final cuando descubramos qué fue de él. Es uno de esos hilos en segundo plano que enriquecen la narración y nos mantienen alerta.

Personalmente, en cuanto a Martín y su historia de amor (sí, en singular y os invito a descubrir por qué...) me quedaré con algo en lo que creo que Vinuesa nos llega a todos: 

"Sigo sin encontrar respuestas, pero tengo la seguridad de que, aunque el destino nos separe en uno de sus caprichos, en algún lugar de sus malogrados capítulos estaremos tú y yo"
José Vicente Vinuesa, Tres historias de amor, mis desastres y yo


Tener la oportunidad de que el propio autor nos presente su novela en La Copela es algo poco habitual, pero que en este caso ha sido posible. Gracias a José Vicente Vinuesa por dedicarnos su tiempo y acercarnos de la mejor forma posible esta historia cargada de personajes y peripecias a través de las experiencias vitales más universales, narradas con una voz muy personal y extraordinaria. 

Os dejo la entrevista que ha querido conceder a La Copela para presentar Tres historias de amor, mis desastres y yo

La amistad ocupa un lugar privilegiado en esta historia. Los amigos del pasado, que te acompañan hasta el presente y los que se van sumando desde el presente a un grupo que quién sabe qué acabará siendo en un futuro. Una macedonia de personalidades, con distintos anhelos y trayectorias, pero que conforman para el protagonista una suerte de muleta, un puerto al que regresar o una trinchera tras las que refugiarse cuando todo va mal y celebrar cuando todo va bien. ¿Es un reflejo lo que vemos en tu historia de la forma en la que tú mismo entiendes la amistad? ¿O es solo el deseo de cómo te gustaría haberla vivido?

Como se suele decir, quien tiene un amigo tiene un tesoro. Sobre todo cuando tratan de aportar, de ayudar. Cuando no es así,  simplemente se van quedando por el camino. Aunque Martín Latorre, nuestro protagonista, tampoco es perfecto... La vida empuja hacia adelante como una corriente, sin parar, y si sabes buscar o tienes la suerte de encontrar, siempre obtendrás un apoyo.... Varios de mis amigos aparecen en la historia,  la esencia de ellos,  aunque nada es real.

No he podido obviar a lo largo de las andanzas del protagonista que presenta una predilección por los viajes. El constante movimiento representado en forma de escapadas con su grupo de amigos o con su pareja. ¿Suponemos entonces que has transferido la pasión por los viajes a tu protagonista?

Sin ninguna duda. Soy un buscador incansable de belleza. Viajar es una de mis pasiones. Me alimento de los lugares, como de un libro o una  pieza musical... El arte, la contemplación de la belleza,  del tipo que sea, me enriquece, aunque también se convierte en necesidad. Nada es perfecto,  menos mal.

Del mismo modo que la amistad queda tan ensalzada en esta historia, se observa una ausencia de la familia. Parece que el protagonista se encuentra en cierto modo solo, aislado de su entorno familiar o al menos, no es ese el círculo en el que se refugia cuando lo necesita. ¿Es intencionado? ¿La construcción de un personaje tan vinculado a sus amistades exigía en cierto modo dejar ese aspecto de su vida en segundo plano?

No sé si intencionado o no pero lo cierto es que con tanto personaje no cabían muchos más.  Aunque la familia de Martín tiene su rinconcito en el sueño,  un microrrelato dentro del capítulo 7, El derrotado. Por cierto, es la única parte de la novela que no es ficción.  Me explico: a los 18 años tuve un terrible accidente de moto y estuve 12 días en coma. Ese sueño lo soñé...

También aparecen otros personajes que son simples conocidos para Martín. Como don Juan Bermejo, un actor de teatro ya retirado, que apenas aparece en el relato hasta el final. A mí personalmente es uno de los personajes que más me gusta. O Tomás Alarcón y su cuadrilla, ese tercer padre. Los amigos de Martín,  los que han ido cuajando con el tiempo, constituyen un apoyo fundamental para él, como para mí. 


No puedo evitar hablar del desamor. El título de la novela ya nos avisa… “Tres historias de amor…”. O bien las historias iban a tener protagonistas diferentes… o asumimos que tres historias de amor no pueden ser simultáneas… ¿O sí? No obstante, sin saber por qué, yo sí que asumí desde el principio que para que una empezara, la anterior debía finalizar y por lo tanto, el desamor iba a estar presente de una u otra manera. ¿Qué va a encontrar el lector respecto a este tema? ¿Entiendes el desamor como una consecuencia casi lógica de una historia romántica? ¿Cuánto más apasionada la historia de amor, más intensamente se vive el desamor de ésta?

Personalmente creo que el desamor está presente incluso en muchas de las parejas más estables. Crisis conyugales que sacuden la convivencia y que muchas veces terminan en divorcios. "No sé por qué terminan las historias de amor,  ¿y quién lo sabe? Muchas veces nos empeñamos en buscar un culpable y a lo mejor ese culpable es solo una excusa." ...otro fragmento de la novela. Otras veces las parejas superan esas crisis o aparentan hacerlo.

Nuestro protagonista es un idealista total, sobre todo al principio.  Me remito a un párrafo de la novela: "Es cierto que muchas parejas aprenden a convivir con el resentimiento y con la adversidad eterna, sin saber, en muchos casos, de dónde le vienen esos rencores, esos odios. Pero yo no podía,  no sabía por qué,  pero el amor era algo a lo que no estaba dispuesto a renunciar en mi matrimonio, aun a costa de éste."

Me confieso muy entusiasta de los personajes que me transmiten realismo. Si bien no me importa que la historia que vivan lo sea, sí que les concedo puntos a favor cuando sus emociones, sus dudas, sus decisiones o sus errores me transmiten cercanía. Esos personajes que cometen fallos que cometería yo o que sufren por lo mismo que sufriría yo. He encontrado mucho de eso en Martín. ¿Debo entender esto como que compartes mi visión respecto a cómo deben ser los personajes? ¿Huyes también de lo excesivamente perfecto y tratas de construir personalidades reales en tus historias?

Totalmente. "La perfección es muerte, la imperfección es el arte". Lo dijo Manuel Vicent, y lo comparto. Un personaje perfecto a mí personalmente no me sirve. Lo puedo admirar pero ya está.  Quiero defectos, como los míos. Me gusta la gente que lucha, como la mayoría de nosotros. Incluso el canalla que te complica la vida...

No puedo huir de un tópico en este tipo de entrevistas y debo preguntar; ¿por qué el salto a la literatura desde la docencia? ¿Es la tuya también la historia de un lector empedernido que un día decide que tiene algo que contar?

Fue la necesidad de expresarme, en un momento difícil, la que me hizo dar ese salto. Es cierto también que soy ese lector empedernido, y entonces ocurrió: las ideas, las líneas,  los personajes empezaron a surgir y a crecer, a generar relatos encadenados. Y aquí estoy,  hablando de mi primera novela...

¿Está siendo una experiencia tan buena como seguramente habías imaginado al decidir emprender este camino? ¿Se aprende de los lectores en las presentaciones y firmas? 

Está siendo una experiencia increíble, cuando intentas generar belleza a través de relatos y personajes que has parido tú. Algunos son falsos espejos de mí mismo, de amigos, o  personajes ficticios, a los que solo les pido la condición de que hablen con sus propias palabras y opiniones. Que se tropiecen y levanten, o no. La literatura te permite soñar... "Me han pasado tantas cosas,  y las que no me han pasado las he soñado,  y las que no he soñado las he deseado".

Se aprende de todo. Cuando lees un libro que te gusta estás leyendo parte de ti. Compartes o te sirves de los personajes, de las situaciones. Alimentas tu personalidad, tu fantasía....


¿Podremos encontrar pronto una nueva historia de tu pluma? ¿Nos adelantas algo de tu nuevo proyecto? 

Pues sí,  estoy en ello, todavía queda bastante trabajo pero la cosa marcha bien. No te diré el título,  que por cierto va a ser bastante provocador para los tiempos que vivimos, pero trata de las transgresiones humanas, de las transformaciones que a veces podemos llegar a sufrir para dar paso a un nuevo yo. Como si matáramos a ese yo anterior, y cuidado con el verbo matar, puede dar mucho de qué hablar...

Más detalles:  el amor y el desamor otra vez; la violencia conyugal, atrevido y arriesgado, veremos; el trasiego de los pueblos, con sus habitantes llenos de sueños y de aspiraciones, a la gran ciudad; el odio entre hermanas, ríete de la guerra de Troya; y la sonrisa enigmática de una mujer muy especial. 

Te dejo un par de fragmentos que marcarán,  solo en parte, el carácter de la futura novela: el desamor y el perdón...

"Claro que he estado enamorado. Sobre todo una vez, cuando las palmeras eran fuegos de artificio. Cuando las hormigas jugaban por mis tripas. Cuando su respiración encendía mi cuerpo, su sonrisa mi herejía".

"El acto humano más heroico es perdonar. Es un abrigo para el alma azotada por los vientos del odio. Un estremecimiento para nuestra belleza interior, un aria de vida"

Como melómana de carácter innato, no permitiría que termináramos la entrevista sin que, desde tu formación y experiencia, nos recomendaras la banda sonora perfecta para acompañar esta historia. ¿Qué sonaba cuando Tres historias de amor, mis desastres y yo se fraguaba?

Hay varias referencias musicales durante la novela: los cuatro últimos lieder de R. Strauss, el vals de Shostakovich, y varias bandas sonoras... Aunque durante muchos momentos, en la génesis de la historia, sonaba Debussy. Sus cuadernos de Imágenes,  la Mer, sus arabescos...Claude Debussy y su mágico sonido.

Y para que os acompañe a vosotros también, La Copela os trae la playlist que inspira y a la vez está inspirada en esta historia.


José Vicente Vinuesa Castellanos es un escritor nacido en Silla (Valencia) que cursó estudios superiores de Música y un doctorado en la Facultad de Filosofía, dentro del programa de estética. Actualmente ejerce la docencia en Castilla la Mancha.

Tres historias de amor, mis desastres y yo es su primera novela y en estos momentos está reimprimiéndose, lo cual no es más que otra buena señal respecto al encanto de la narrativa de Vinuesa. Desde La Copela, le deseamos mucho éxito con este trabajo y los futuros que, ya seguro, encontrarán su hueco aquí. 



lunes, 5 de septiembre de 2016

UN VERANO EN LA PROVENZA (Olivia Ardey)


Monique vive un dulce momento profesional, premiada con el galardón más destacado de la prensa francesa, cuando todo da un giro inesperado y se ve traicionada por sus compañeros de profesión y colocada en el ojo del huracán protagonista de unas fotos comprometidas que empañarán el éxito logrado tras tantos años de duro trabajo. 

Es así como decidirá un retorno al lugar de veraneo de su infancia. Un retiro a la Provenza para poner distancia, tomarse unas merecidas vacaciones y reencontrarse con momentos, personas y recuerdos del pasado... algunos de ellos de sabor agridulce. 

El padre de Monique es dueño de un emporio de comunicación y su hermano sigue los pasos del progenitor con un importante cargo en el grupo. Monique ha vivido la profesión de una forma muy diferente, como corresponsal en lugares de conflicto y trabajando duro en la fragua de una carrera que da sus frutos al fin. Vive con sus dos amigas en un céntrico barrio de París. Las tres chicas se complementan a la perfección y conforman un divertido trío que nos arranca sonrisas en muchos momentos de la historia.

Muy diferente era esa adolescente que dejó en la Provenza. Eclipsada por su prima Giselle, la cual recibió un ramo de flores que ella siempre deseó para sí y que terminó por quedarse con algo más que el ramo, mientras ella, agazapada en la sombra, se lamentaba de su falta de éxito y sus inseguridades. 

No solo le dejó su tía recuerdos en aquella casa de la Provenza. El legado incluye una llave que abre el camino hacia una historia de amor prohibido que dejó tras de sí una estela de dolor, pero también una lección de superación y lucha que marcará a Monique y nos llegará muy hondo a todos. 


Construye Olivia Ardey unos personajes en positivo. Una de esas historias en las que sus protagonistas no se ven vapuleados sin tregua por la adversidad, pero que se enfrentan a decisiones difíciles y a momentos de dolor cotidianos. La huída hacia delante, que tiene como meta siempre la consecución de los objetivos y como bandera alcanzar la felicidad

No vamos a encontrar en esta novela a un personaje que encarne el mal. Todos los protagonistas presentan un lado negativo en algún momento. Tal y como somos cada uno de nosotros (o deberíamos ser), la paleta con la que crea su obra Olivia, está compuesta por luces y sombras que se desdibujan para construir una escena final de contrastes

Un verano en la Provenza incluye un evocador viaje a la región, en el que Olivia Ardey nos acerca colores y aromas con una espectacular capacidad para la recreación. La visión de unos paisajes y unas gentes que parecen estar tras nuestra ventana a través del avance fluido por una novela que no se nos atasca y de la que pasamos las páginas a un nivel vertiginoso sin percatarnos. 

La historia dentro de la historia, otorga a Un verano en la Provenza una segunda dimensión y constituye un punto muy a favor para decantarnos por descubrir una novela que no solo es bonita por fuera (que lo es y mucho) sino que lo es por dentro


Olivia Ardey nació en Alemania, pero pronto se trasladó a Valencia donde reside y trabaja actualmente, siempre vinculada a la literatura. 

Entre sus muchas publicaciones y premios, encontramos "En la Toscana te espero" (Premio Dama 2014, Mejor Portada en edición española, Premio Rosas 2014 Mejor Portada nacional), "Una chica con estilo" (Premio Púrpura Romántica 2015, Mejor Novela Histórica) y "Regálame París" (Premio Dama 2013 Mejor Novela Romántica Actual, Premio Dama 2013 Mejor Portada en edición española, 2º Premio 2013 El Rincón de la Novela Romántica Mejor Novela Contemporánea, Premio Locas del Romance 2014 a la Novela romántica más simpática). 

Asistimos a la presentación y firma de "Un verano en la Provenza" en la librería ExLibris y descubrimos a una autora cercana, que habla sin tapujos de lo que rodea al mundo de la literatura, que se entrega en la creación de cada una de las historias y que disfruta compartiendo su pasión por la palabra escrita.