Hace más de veintidós años que Quincy Miller fue juzgado por asesinato. El jurado consideró probado que había irrumpido en el despacho de un abogado en Seabrook y le había disparado causándole la muerte. Tal vez tuvo algo que ver el que todos los miembros de ese jurado a excepción de uno fueran blancos y Quincy sea un hombre de color. Tal vez fueron otros los motivos que lo llevaron a prisión con una condena de cadena perpetua. Pero las pruebas no eran concluyentes. Más bien eran dudosas y los testigos no eran mucho mejores.
"Su cadáver fue hallado en el suelo detrás de su escritorio, con sangre por todas partes. Le habían disparado dos veces en la cabeza con una escopeta de calibre 12, y no quedaba mucho de su rostro."
John Grisham, Los guardianes
El trabajo en los Guardianes no es sencillo. Deben lidiar con un montón de solicitudes (muchas de ellas de personas claramente culpables) y además no obtienen grandes beneficios que, en gran parte, se destinan a sufragar los gastos para nuevas investigaciones. Post es abogado. Desde el principio aceptó clientes que no podían permitirse uno y más tarde, tras unas circunstancias que os dejo descubrir en el libro, estudió en el seminario y fue ordenado sacerdote. Él y sus dos compañeras hacen grandes esfuerzos por seguir adelante en su labor y para ello hacen muchos sacrificios. Pero los casos en los que han logrado liberar a una persona inocente les empujan a continuar.
Hay tantas lagunas en torno a la sentencia de Miller que Post no puede estar más convencido de su inocencia. Si bien no termina de encajar todas las piezas que tiene y es consciente de que le faltan muchas para completar el puzle, está decidido a dar con las respuestas que exoneren a su cliente.
La historia arranca despacio. El autor te presenta a los personajes poco a poco. Post narra todos los acontecimientos en primera persona y no tardamos en conocerle bien. Pero además, debemos conocer los hechos. Todos los detalles de la investigación que él conoce, los que irá descubriendo y los que tal vez no llegue a descubrir. No deja de repetirnos que su misión es demostrar la inocencia de su cliente, de modo que no es una prioridad resolver el caso que lo llevó a la cárcel, sino convencer a la justicia de que Miller no fue quien cometió el crimen. No obstante, puede que la exoneración de Miller sea peligrosa para quienes en su momento se empeñaron tanto en que cargara con el delito. Post no sabe cuando acepta el caso que este puede ponerle en grave riesgo.
"Desde que los Guardianes comenzó su labor, hemos abierto dieciocho casos. Ocho terminaron en exoneraciones. Un cliente fue ejecutado. Seis son actuales. Cerramos tres cuando nos convencimos de que nuestros clientes eran culpables."
John Grisham, Los guardianes
Al principio llegué a pensar que todo el detalle del proceso jurídico podría llegar a aburrirme, pero lo cierto es que ha resultado ser una lectura muy interesante. A medida que la trama se va enredando y nos encontramos con más de un percance que complica la investigación de Post, me he enganchado a la historia y no podía dejar de preguntarme qué pasaría al final tanto con él, como con su cliente.
El final de la historia es algo que debéis descubrir vosotros. Yo solo os diré que he quedado muy contenta con la novela y que además en la nota final del autor incluye varios casos que le han servido de inspiración y que me han parecido verdaderamente interesantes. Aporta mucho a nuestra percepción de la trama conocer en quiénes se inspiró Grisham.
Podéis leer un avance de Los Guardianes haciendo clic aquí.
John Grisham se dedicó a la abogacía antes de escribir novelas. En 1988 publicó la primera y desde entonces publica casi una novela al año y muchas de ellas se han llevado al cine. Seguro que La gran estafa, La tapadera o El caso Fitzgerald os resultan familiares. Son solo una muestra de su extensa obra. Podéis encontrar muchas de sus novelas publicada por PLAZA & JANÉS aquí.
La verdad que yo también opinaba eso de que el thriller legal te puede aburrir por si se enredan mucho con el juicio, pero esta novela me ha gustado mucho y se lee a un ritmo muy alto.
ResponderEliminarBesos
¡Exacto! Tiene muy buen ritmo.
EliminarMe legro de que también te haya gustado.
Gracias por visitarme y comentar.
¡Nos leemos!